Es muy fácil creer que todo saldrá mal, que la situación se pondrá peor cada día, que nos podemos quedar sin empleo, que nuestros hijos irán de mal en peor con la educación que están llevando ahora, etc.
¿Qué harías si supieras que tienes 24 horas de vida? Esta pregunta no es para desanimarte sino para alegrarte. Déjame decirte que es una razón para despertar y comenzar a realmente vivir.
Si de ansiedad hablamos, hablemos de preocupaciones. Esto si que está a la orden del día. Nos preocupamos por el pasado que ya no podemos cambiar; la típica frase: “Si yo hubiera o no hubiera”.
LA PREOCUPACIÓN. Es el cimiento para la ansiedad, la depresión y para el fracaso integral. Es un paquete de temor a lo negativo o a lo malo que puede suceder en el futuro.